martes, 15 de septiembre de 2009

Misión: Postes-Tala-Postes 68Km...

"Si comentaran a la mayoría de los ciclistas de montaña que visitan la primavera que fuiste de Postes a Tala y de regreso, ellos dirían: -estan bien pende$%&/s-" eso nos comento el Master al finalizar la rodada del sábado, y depués de la junta celebrada ayer en las oficinas del bosque de la Primavera dondenos corroborarón que el 90% de los ciclistas que visitan la Primavera no sale del circuito "Mosca-Toboganes-Hermosisima" pues estamos seguros que es un hecho...

Pasemos a la descripción de los hechos...

Sábado 6.30 de la mañana arrivo al lugar indicado y el Peter ya estaba más que listo, la fresca mañana dejaba respirar un aire no tan agradable, venían llegando los integrantes del escuadrón, pero seguía faltando el comandante en jefe de las fuerzas Primates: Master.
Llegó algo tarde contrario a su costumbre y eso definitivamente no era un buen indicador, nuestro Coronel no aparecía y sentí por un momento que nos haría mucha falta para realizar esta operación, las cosas no estaban marchando bien...

Apenas avanzaba el escuadrón y ya uno de los nuestros sufría con su armamento, un chingado descarrilador que desde las operaciones del Martes le estaba fastidiando al Tigre, pero que pensó seguramente que solo se compondría: mal!, las cosas hay que repararlas, nunca algo que ya falló tendera a arreglarse por si solo...

25 minutos mermarón nuestra salida temprano, las cosas no seguían por buen camino. Forest fiel a su costumbre se atrincheró, saco su botiquin y como pudo, con algo de cinta y pegamento dejó medio funcionando el descarrilador, suficiente para continuar con la batalla.

Llegamos al entronque con Brujitas y bajamos por Toboganes, esta sería la unica parte adrenalinica del trayecto, el unico descenso disfrutable, lo demás sabiamos sería una batalla dificil contra el enemigo "pendiente" y el "cansancio"

Marchamos sobre posiciones enemigas "Obsidianas" y salimos ilesos afortunadamente, almenos fisicamente ya que la final del recorrido supimos que forest sufrio una ponchadura en este terreno; cuentan los que saben que una caida en este lugar te deja fuera de combate en un santiamen, basta con ver la cantidad de piedra obsidiana suelta y filosa que espera con ancias que caigas de tu corcel para herir de gravedad los musculos de tu cuerpo y festejar una victoria.

Forest solucionó el problema mas rapido que de repente y seguimos el camino por el sendero que te lleva al valle del halcón... las apuestas no tardaron en aparecer con aquello de sortear los troncos y arboles caidos que las lineas enemigas colocarón aqui, para mermar los animos de cualqueir combatiente que llegue hasta este punto, pero como buenos Primates la mayoría paso sobre todos ellos sin mayor problema, no asi su general Panzer quién sufrió y no pudo con dichos obstáculos.

Seguimos el camino, sabiamos que debiamos llegar al punto de abastecimiento lo antes posible, ya que la desmañanada, y el esfuerzo comenzaban a jugar malos ratos mientras el escuadrón avanzaba, por fin despues de un par de horas pudimos devisar el checkpoint, y tomamos poseción de un campamento de especial belleza situado en el municipio de Tala, Jalisco y a pesar de ser la mitad del camino, sabiamos que solo una tercera parte de la misión había culminado...

Reabastecimos, tomamos tantas provisiones y bebimos tantos liquidos como pudimos, habia llegado la hora del verdadero reto: regresar al campamento base, pero sin uno de los nuestros, que tuvo que abandonar la contienda contrario a lo que el deseaba, no importa Juan, será para la próxima.

Cercano a las 11.00 se inicieron los movimientos en un ambiente distenido y pronto en la primera subida lanzo su atque y colocó a cada miembro en su lugar, Peter comenzó a rodar contra todo y su capitan de batallón le volvió la espalda: había que sacarlo de allí a como diera lugar...

Forest fué claro, como carne de cañon solicito permiso para lanzar un ataque en solitario, y los altos mandos asi lo aprobarón, una vez culminado este primer ascenso se ecomendo a los espíritus del bosque y jamás lo volvimos a ver.
Ya aquí el enemigo se percato que cada vez eramos menos y que podía atacar a placer, fué entonces cuando bajamos la guardia al descender sobre la pared de piedra con corceles sobre el hombro y sin saber por donde, que los francotiradores dierón en el corcel del comandante, justo en un rayo, lo que nos obligó a ralizar una brigada de rescate justo allí enmedio de la nada y en una zona baja, blanco facil para que el enemigo siguiera haciendo de las suyas. De inmediato el comandante comenzó a reparar su fvehículo, una vuelta aqui, otra aca, y pudo por fin alinear el aro para que siguieramos la marcha, mientras los demas tratabamos de repeler el ataque de unos mosquitos que no picaban: mordian, con cada ataque te dejaban un horificio de medio milimetro por el que tus plaquetas comenzaban a salir, 25 minutos fueron suficientes para terminar heridos todos no de gravedad pero si con una comezón que no habia sentido jamas.
No pasaron ni 30 metros cuendo de nueva cuenta el todo terreno del comandante volvió a fallar, -no es posible que sigan pasando estas cosas- respingué, pero me preste de inmediato a solucionar el problema, algo simple pero que de nuevo permitio mi descuido que otro centenar de mosquitos se pegaran a lo que me quedaba de piernas para seguir mamando sangre...

Llegamos por fin al rió de agua helada y sabiente que esto nos devolveria las fuerzas me tire pecho a tierra, escondi mi vehiculo y me arrastre hasta el mismo, efectivamente el agua helada nos regreso un poco de animo y pudimos por fin quitarnos la comezón hiriente del ataque al que habiamos sido expuestos...

Salimos nuevamente del agua arrastrandonos como caimanes y retomamos el camino y llegamos a la tan temida zona abierta, el ingreso de la brecha que nos llevaria de vuelta a casa, de vuelta a pelear con el ejercito de "Obsidianas"
El enemigo nos conocía bien y sabia que aquí podria destazarnos en esta batalla dados los aspectos más debiles: la falta de entrenamiento, la mala alimentación, el cansancio acomulado, la falta de concentración y los rayos del sol a plomo...
Inconsientemente temeroso de fallecer en el intento cada Primate tomo su ritmo olvidando por completo que veniamos como un batallón. Peter quedó solo al final, su falta de practicas en campo comenzarón a despedazar sus muslos, a sobrecalentar sus pantorrillas y a jugar con su mente, a más de alguno nos dierón ganas de volver por él, pero equivocadamente cada uno había tomado la decisión de salir solos como fuera...

Cuando comenzarón las pendientes a atacar con todo pocos lo esperamos, más por la necesidad de reponernos debajo de una sombra que por deveras saber como venía nuestro compañero, en eso el Tigre, eufórico como solo el lo sabe ser, nos pasó como si viniera en una misión suicida, solo alcance a entender: "no me detengan, por favor no me detengan", con ojos saltones y pupilas dilatadas no me sentí capaz de detenerlo, así que lo dejamos continuar su ascenso como soldado enfermo y habido de sangre...

Seguimos la batalla y llegamos a la parte final del camino, las obsidianas nos esperaban con una pendiente de 15% y 450 metros finales en los que no debiamos bajar del corcel a caminar, no esta vez, no se viene al bosque a pasear a la bici, para eso esta la vía recreactiva, para eso hay cientos de grupos urbanos, no debemos bajarnos a caminar, no! así pedaleamos hasta que nuestros pulmones quemarón y nuestras pantorrilas ardierón.... despues... ¡pedaleamos más!

Nuestro comandante lanzó el ataque con grito de guerra, un grito que retumbo en lo mas profundo de mi ser y me desperto de ese somnoliento estado en el que habia caido diciendome a mi mismo: "no te bajes, pedalea, no seas marica pedalea, sigue cabrón pedalea..." Así Bob se lanzó a cuidar la retaguardia de nuestro comandante, yo honestamente no pude seguir ese ritmo de batalla comencé a retrasarme y a caer en ansiedad, pero recordé que aún traiamos un soldado más detras de nosotros, entonces pense en tomarlo como pretexto para parar un momento, pero mi ego no me dejo asi que continue...y fué entonces cuando al llegar sobre la brecha vimos un punto rojo, pensamos por un momento que el teniente Forest habia fallecido aqui, que era solo un pedazó de lo que el enemigo habia dejado de él, pero al llegar nos dimos cuenta que no era así, que el había vencido y prueba de ello era ese fruto prohibido que dejo sobre su inicial formada por soldados "Obsidianas" derrotados por él, y fué el Tigre quién hizó el hallazgo quien alento a los que veniamos retrasados y heridos a culminar la obra apuntando la victoria, una manzana que compartida nos devolvería lo que necesitabamos para regresar al punto de partida.

Pasamos lo más dificil, de aquí en delante sería solo cosa de mantener la marcha a un mismo ritmo, ya no habia por que temer... error, una emboscada al reingresar al bosque tomo por sorpresa al teniente Bob, quebrandole una pierna a su corcel..., no por favor -dije- esto no puede estar pasando.
Mientras intentaban arreglar el desperfecto entendí que el enemigo es fuerte y siempre te sorprende contraatacando. Heridos todos por la derrota aparente de nuevo cundió el panico y salvese quién pueda, la organización desapareció de nuevo, el frió se apoderó de los musculos sin importar los 36ºc y rompió nuestra formación de ataque una vez más...

La lesión sería irreversible los malos pensamientos nublaron mi mente y no recuerdo que mas pasó, solo tengo destellos de mi escuadrón marchando en solitario sobre el último tramo, cada uno olvidandose que veniamos en grupo, cada uno con su meta personal, cada uno a su ritmo y a su envidioso estilo, cada uno orgulloso de culminar la asaña, de terminar en una sola pieza, de demostrar que pueden, de ser superiores, de ser... simplemente de ser....

3 comentarios:

Master dijo...

Bien Panzer por su cronica, bastante emotiva..ja.ja.ja

Saludos

PRIMATE Tigre dijo...

Muy euforica, cuidado con eso no queremos esos sentimientos en este Blog, ok???

No ya en serio muy agradable y amena la cronica, la neta te quedan perronas, felicidades captaste todos los detalles y los plasmaste con tu peculiar humor.

Tu padrino que te estima cabrón.
TIGRE

peter dijo...

!!!VIVA MEXICO!!!! me toco venir a trabajar, pero esta cronica de la PRIMATEAVENTURA, me ha subido los animos.
OMAR (GENERAL PANZER) eres un chingon redactando, has llevado a niveles epicos nuestros entrenamientos y has sabido narrar los detalles tanto del ambiente externo como los que fluyen en lo mas profundo de los corazones y las mentes PRIMATES, Cual juglar medieval, vas contando las hazañas, los logros y caidas y en tu afan, sin darte cuenta ahora te seguimos, mexicanos, del norte y el sur, latino americanos, anglo americanos, y tambien del otro lado de oceano, nuestros amigos de España y Suiza. Felicidades Omar, es un honor para mi reirme a carcajadas con todo lo que tu narras de nosotros.