Crónica de una Cronoescalada 1/2

Video de la reivisón de Pista



23 de Mayo de 2010, el día de inicio de la "copa contra reloj de ciclismo de montaña". En esta primer etapa aceptamos el reto de ascender a la Torre 1 en el bosque de la Primavera: un recorrido de 10 Km. con más de 500 metros de desnivel. El punto de salida estaba marcado en un fraccionamiento de bosques de Sta. Anita, al sur de Guadalajara, en donde nos preparamos para la carrera calentando e hidratándonos. Al mismo tiempo tuvimos la oportunidad de saludar amigos, ciclistas y organizadores, y compartir impresiones sobre el evento.
En esta ocasión no competíamos contra otros ciclistas, al menos de manera directa, sino contra el reloj. Cada participante saldría con un minuto de diferencia e intentaría hacer el menor tiempo posible en su recorrido. Con la idea en mente de dar el mejor esfuerzo nos concentramos en la zona de prearranque. A un lado, la familia Caxca y el Master nos brindaban su apoyo incondicional. Por cierto, las malas noticias fueron que el Master no correría en esta ocasión por motivos de salud y que el Compa no llegaría por que su niña estaba enferma.
3... 2... 1...
Desde la línea de salida los jueces fueron nombrando a cada competidor hasta llegar al número 32, el mío. Emocionado me coloqué en el lugar señalado. Escuchaba las indicaciones: "30 segundos para salir", "10 segundos" "3,2,1...". Arranqué lo más fuerte que pude mientras escuchaba como quedaban atrás los aplausos de Gaby y Master.
Dos minutos después saldría Panzer y un rato después el Caxca. Saber que atrás venían dos primates buscando mejorar su tiempos fue una presión adicional, pero finalmente una motivación para pedalear más fuerte.
Los primeros 5k
La primera parte del recorrido estaba marcada con unas vallas sobre el pavimento. Después el camino se volvio de tierra y, en unos metros más, en empedrado. En cada cambio de terreno la inclinación se hacía más pronunciada y exigía un esfuerzo adicional para mantener una buena velocidad.
Después el camino me llevó hasta la subida llamada la tronadora, una parte que demandaba mantener el ritmo para no perder tiempo. Volteó hacia atrás y para mi sorpresa no se ve ningún ciclista, esto me motiva un poco y sigo pedaleando hasta la trampa de arena: tierra suelta y jal en todo el camino. Afortunadamente, el reconocimiento de la pista que hicimos en días anteriores me sirvió para seguir el trayecto menos problemático y salir de esta canija parte sin perder mucho tiempo.
A lo lejos veo el puesto de abastecimiento y pienso: "Ya voy a la mitad, ahora siguen otros 5 kilómetros y listo". Pero cualquiera que haya tomado el desafío de subir a la Torre1 (principiante o avanzado) sabe que los siguientes kilómetros son los más difíciles debido a la inclinación y a las características del terreno. Y justo cuando la mente me empezaba a jugar bromas y a decirme "estoy cansado", ví a unos ciclistas en la subida empedrada anterior a la desviación al autódromo. Decidí acelerar mi paso para rebasarlos y cuando los alcancé ví que no estaban inscritos en la carrera, sólo estaban de paseo. En cada metro que avanzaban se veía el esfuerzo en sus caras, no eran profesionales, pero si eran ciclistas decididos a lograr su metas. Así estamos todos, superando obstáculos que parecen "imposibles". Este día mi "imposible" era bajar mi record de 58 minutos en la escalada.
En ese momento me dí cuenta que llevaba la mitad del trayecto sin ver a otros competidores, y como si los hubiera invocado en unos instantes más me rebaso el primero, y después el segundo. Eran dos ruteros que decidieron probar su cadencia fuera de las carreteras asfaltadas... y que cadencia. Sólo pude ver como se enfilaban hacía los escalones de piedras para después subirlos a base de agilidad, más que de fuerza. En breve me quedé pedaleando sólo, escuchando el viento de la mañana y luchando con mis pensamientos: "estoy cansado..."
Continuará.

Video Realcionado tomado del Canal Hermano Primate "Orate8000", a partir del minuto 4.40 comienzan las salidas.