jueves, 19 de noviembre de 2009

Marathón "Pico Azul"


El rugir de la 8 cilindros apenas si se escuchaba, la música de un ipod juvenil tocaba en el sonido del vehículo en el que nos transportabamos, solo una parada para comprar caramelos, de esos de los que el Caxca le compra a su hijo, un leve sonido del masticar de dichos caramelos y algo de chicharrón que traimos en la bolsa, un poco de galletas de avena que saco Pipen de su mochila, uno que otro chascarrillo del Caxca que intentaba arrancarnos alguna sonrisa, comentarios acertados del Master sobre entrenamiento y otros temas pero nada más..; el cámino fué mas bien silencioso y meditabundo, como si fuesemos 4 extraños en un mismo carro pero con un mismo objetivo: conquistar el Pico Azul de Morelia.

Al llegar una bervena popular nos esperaba, juegos pirotécnicos y muchisima gente, sin olvidar el tráfico que retrasó nuestra llegada al hotel, algo de un Festival de la Música era lo que tenia movilizada a la ciudad completa, lo que nos dió tiempo de observar y de imaginar que todo ese alboroto era por que habiamos llegado, es válido, en las neuronas cerebrales es válido hacer eso y con ello, crecerte y darte ánimo para el reto que tienes enfrente.

Por fín llegamos al hotel nos instalamos y las miradas no se hicierón esperar, la formalidad y seriedad de cada uno de los que ivamos era indescriptible, concentrados, formales y bien uniformados, era casi imposible que no nos voltiarán a ver. Acomodamos lo que había que acomodar y tomamos la decisión de ir a cenar, carbohidratos porsupuesto y la recepcionista del Hotel nos indico un lugar que no parecia bar ni restaurante sino una extraña combinación de las dos, tomamos asiento y una "Pocahontas" nombrada así por el Master nos recibió haciendose la interesante pero con un tono un poco extraño, es casi como si nos quisiera pedir un autografo sin saber quienes eramos, pero segura de que eramos gente importante.

Pedimos nuestra cena, nuestra bebida y un pequeño grupo de 2 varones y una damicela afinarón sus instrumentos y comenzarón a tocar la canción de "Have you ever seen rain" de Creedence, solo eso faltaba para redondear el día, música excelente para escuchar, y apenas termino con esa para dar paso a "Piece of my heart" de Jannis Joplin, no podiamos pedir nada más...

Término la cena y decidimos dar una vuelta para que la comida se acomodara, sobre la calle principal, cerrada al tráfico por el evento, dimos una vuelta y apreciamos la mejestuosa catedral, tomamos un par de fotos y había llegado la hora de ir a descansar, anciosos unos, nerviosos otros y otros más como si estuvieran en su casa leyendo una revista, resumiendo, cada uno a su estilo afrontando la situación, y fué en ese momento just antes de ingresar al hotel que llego un contingente de 3 camionetaas repletas de bicicletas muy finas y elegantes, era el equipo Pathros de Guadalajara encabezados por el actual presidente de la liga José Antonio Barba que aprovecho para saluar al Master y hacer la invitación a la entrega de premios de Lijacim, cosa que nos apreció bastante agradable y una cosa mas para sentirnos satisfechos, los objetivos se han estado cumpliendo gracias al trabajo de todos.

Llegamos al cuarto y las cosas no cambiaban mucho, demsiada seriedad, pocas palabras, pero un rostro de felicidad en cada uno, era como si quisieramos adelantar el reloj 12 horas y estar ya equipandonos para enfrentar el reto por el que habiamos viajado tantos kilometros, hicimos la rutina de aseo personal de cada uno, nos acomodamos cada uno es su cama y comenzamos a soñar que pedaleabamos, juntos, como un equipo, fuertes y agresivos, listos para toda contingencia y adeversidad de la carrera, concientes de que sería un reto diferente por muchas circunstancias alrededor del evento principal.

Ya casi listos para caer en los brazos de morfeo, un celular sonó, y de inmediato un serie de chistes locales se desencadenó para hacer que nos carcajearamos por argo rato...

8 horas pasarón y la necesidad fisiológica despertó al Panzer, y con lo que cenó no era para menos, al poco tiempo sono el despertador y comenzó el ritual matutino, colocación de licras, maillot, calcetas, chamarras, bloqueador solar, cremas, talco y demas chucherias cubrieron a cada uno de los Gorilas, bajamos al desayunador por unos wafles con miel, mermelada y una penca completa de bananas, para esa hora las cosas seguían bajo la misma tónica, mucha seriedad, concentración y pocas palabras.

Camino al lugar del evento los nervios comenzarón a salir de una u otra forma, chistes sin sentido, comentarios fuera de lugar y exaltación; al llegar nos percatamos que había varisos grupos ya conocidos, el más importante e infaltable en cada evento de esa magnitud el equipo Turb encabezado por Ignacio Torres, los loros de Colima, Pathros obviamente entre otros y fué allí mismo donde pude conocer personalmente a Daniel Alva presidente de la COCIM del D.F.

Instalamos números, en bicicleta y espalda, llenamos anforas, posicionamos geles y comenzamos el calentamiento, 10 minutos fuerón suficientes para elevar ritmo cardiovascular y sentir las piernas calientes, una vuelta tranquila a la presa y al arrancadero.

Como es costumbre el Master dió un par de consejos, el plan era simple, peguensele a Pipen hasta donde puedan, y de allí salvese el que pueda, al ritmo que cada quién pueda y a mentar madres contra quién sea.
Se dió el banderazo de salida y a los pocos metros una brecha demasiado angosta sirvió para que Pipen cantara: "La guadalupana, la guadalupana..." situación que arranco las risas de los allí presentes y que sirvió en mucho para olvidar ese nervio canijo de cada arranque, una vez liberado el cuello de botella, a toda marcha, una descenso accidentado por piedras nos llevo hasta las faldas de imponente "Pico Azul" y sus 700 mts de desnivel que desconociamos por completo.

Los primeros 6 kilometros más o menos nos mantuvimos compactos, pero el peralte de las trepadas comenzó a cobrar factura de uno que otro ciclista, incluyendome, situación que permitió que el Master se me perdiera por el resto de la carrera y que Pipen y Caxca me psarán como si vinieran jugando, situación que me moivó a subirme de nuevo y pegarmeles en la subida. Pasarón los kilometros y apenas un par de planicies para tomar un poco de aire, conectar con el siguiente cerro y a seguir escalando... mucho trabajo me costo conectarme con el Caxca y en una curva que te permitía ver a los que ivan delante de ti, escuche los ya conocidos gritos del Master por segunda vez en esta carrera: "Muevete Panzer" y lo unico que pude contestar fue un "Vengo a paso coquetón con el Caxca" situación que arranco una que otra risa de los que nos rodeaban y de alguna manera esto me dió algo de fuerza para continuar.

El paso coquetón de Caxca es casi imposible de seguir y mas cuando las subidas son interminables, así que lo perdí y jamas lo volví a ver, dado que el descenso en brecha abierta es solo una pluma a merced del viento que se mece entre cuerva y curva evitando sanjas y vados enlodados, el Master por su parte hasta donde se por versiones de los testigos, llegó al sendero para Dow Hill, (prueba de ello eran los 5 downhilleros que se encontraban echando porras a cada uno de los que ingresaban a este sendero), se olvido de los frenos y se le volvió a despegar al Caxca, quién por su parte y había alcanzado a Pipen en este tramo de pura técnica y habilidad al manubrió, y fué precisamente en una de estas bajadas tetricas que nuestro coequipero sufrió un aparatoso accidente (mismo que aparecera en otra entrada), yo por mi parte cuando ingrese a este punto alcance a escuchar a uno de los practicantes de Doen Hill... "ahora si viene lo bueno, agarrense..." y no era para menos 2 kilometros de absoluta diversión y prueba de habilidad encima de la bici, pero a lo lejos, de momento me pareció ver al Pipen, es sabido que su fuerte es la trepada, no asi el descenso técnico, pero aún con esto me pareció raro haberlo alcanzado, y no fue sino hasta que lo tuve a 5 metros que me percate de lo que habia pasado, pude ver las heridas abiertas y supurantes empolvadas aún, tome esto como pretexto para bajar de la bici y tratar de evitar los calambres y pedir auxilio a una de la cuatrimotos que estaban para auxiliar, apenas pude entender lo que me contestaba, se le notaba aturdido aún por el golpe, y camine un momento con él, en ese momento una paralisis del muslo derecho me obligo a soltar la bici y apretar fuertemente, pero al levantar la cabeza Pipen ya habia zarpado así que tuve que hacer un esfuerzo adicional para montar de nuevo y terminar con la ultima parte del trayecto.

1:42 minutos fue el Crono del Master el Caxca 2 minutos despues y Panzer y Pipen 8 y 9 respectivamente, un tiempo aceptable dadas las condiciones y la exigencia de la Pista.
Una vez que cruce la meta recuerdo los gritos de los espectadores apoyando hasta el final, un saludo con mis coequiperos y un respiro apenas para dar media vuelta y esperar a Pipen, que como todo un gorila guerrero termino la hazaña con todas las lesiones aquejando su humanidad, una abrazo de felicitación, y de inmediato a la ambulancia para que fuese atendido, no huesos rotos ni lesiones de gravedad afortunadamente, y en eso estabamos, yo tirado como costal de Papas en el pasto haciendo los centenares de preguntas que se te vienen a la mente despues de una carrera, si hubiese paretado aqui, si hubiera hecho esto,que tal si lo otro, en fin, y en esas estaba cuando escucho al microfono mencionar que venia llegando el tan mencionado Nacho, ¿Que? acabo de terminar una pinche vuelta y este wey ya le dio dos, ah no ma..ma, me levante, tome mi cámara y pude captar el momento de su llegada, una foto con todo el equipo y recuerdo sus palabras: "Que bueno que vinieron Primates" uts, algo para celebrar y sentirse feliz, un comentario simple pero significativo para los ciclistas comunes que sabemos de su capacidad, Gracias Nacho!

Regresamos al hotel sin esperar más, no habia nada que esperar, cada quién llevaba su trofeo, y no hablo de la medalla sino de un recuerdo que cada quién atesorará a su manera, al final ese es nuestro trofeo, la conquista de una carrera más. Tomamos nuestro baño alistamos las cosas y regresamos a casa, una estadia breve pero llena de muchas anecdotas, mismas que servirán para enriquecer el banco de memoria Primate, asi como el de experiencias personales....

¡Vamos por la que sigue!

















2 comentarios:

Master dijo...

Una redaccion impecable como siempre, logrando transmitir lo que sentimos en cada momento, bien hecho Panzer.

La adrenalina de cada competencia se ha convertido en nuestro alimento, ver cada dia evolucionar a mis compañeros lo convierte ya en un gran triunfo.

Caxca, Panzer, Pipen es un orgullo pelear a su lado mis estimados.

Saludos

Anónimo dijo...

Caxca..

Gracias por los exceletes comentarios que plasmaste en esta entrada mi estimado Panzer. Master el orgullo es nuestro, parte de nuestros logros te lo debemos gracias a tu interés en ayudarnos a ser mejores deportistas y personas.

Un abrazo a mis coequiperos Primates con los que tuve la fortuna de pedalear de nuevo en esta ocasión.

Sinceramente. Caxca.