miércoles, 31 de julio de 2013

PANZER 70.3

 
Triatlón San Gil 113k
El pasado Domingo 14 de Julio del 2013 fue el día debut para un Primate en una competición denominada como medio Iron Man por las distancias de cada una de las 3 disciplinas: 1.9 km de natación, 90 km de ciclismo y 21.1 km de carrera pedestre.
He aquí lo que aconteció ese día.
 
 
 
4.00 a.m. suena el despertador y después de una noche entera de estar dando vueltas en la cama entre un bebe que extrañaba tanto su cama y toda mi ansiedad creo que lo mejor es que el despertador haya sonado de una vez por todas. Al enderezarme lo primero que recibo es un "Llego tu día" proveniente de mi Anel, que no esta de más decir que ha vivido esta última semana tan intensamente casi a la par que yo este acontecimiento.

Tomo mi ropa y me adueño del baño, colocar el trisuit es un paso muy importante, es cuando dejas de ser persona y te transformas en guerrero, enfundado en esta ligera y delgada tela te hace sentir fuerte, agresivo, invencible.

Una noche antes prepare todo 7 veces, sacaba prendas y volvía a acomodar todo en mi bolsa de transición, lo volvía a sacar y repasaba todo en la mente una y otra vez, no debe faltar nada ya que estamos hospedados a 15 minutos del lugar del evento... tenía que estar bien seguro de llevar todo lo necesario conmigo.

Una vez hecho esto me siento y espero que mi equipo acomode todas sus cosas, mientras disfruto de un ensure de vainilla y un gel energético, pero es tanto mi nervio que de repente se me antoja todo, quiero comer, huevos, chilaquiles, molletes, lo que sea, pero quiero comer.

Aminoro mis nervios y sigo esperando hasta que me dicen: Estamos listos. Salimos rumbo a San Gil y ya la fila de autos es inmensa, yo en lo mío tranquilamente le pido a Anel que maneje hasta el estacionamiento, bajo todas mis cosas del auto y me dirijo a pie hasta la zona de transición.

Centenares de atletas acompañados de sus familias caminamos en la misma dirección, el bullicio es parecido a aquel de un tianguis, yo camino en solitario con mi mente en blanco seguro de que me he preparado a conciencia y que todo saldrá según mis pronósticos.


Llego a la transición y en lo que acomodaba mis cosas me percato que no traigo mi hielera con mi gel y mis ánforas para correr, aún así lo tomo con toda calma, acomodo lo que tengo, casco, lentes, ánforas, zapatillas y ya una vez revisado todo voy en busca del carro para alcanzar a ingresar de nuevo a la transición.

Camino poco y troto poco, camino otro tanto y vuelvo a trotar, esto ayuda a disipar el nervio y también a bombear sangre a los entumidos y nerviosos músculos. Por fin después de 10 minutos doy con el auto y ahí está la familia alistándose para acompañarme en esta épica batalla, de las mas importantes de mi corta pero entusiasta carrera deportiva, por no decir la mas importante hasta hoy.

Tomo mis triques, regreso a la transición, intercambio palabras con 2 chicas que tienen toda la buena vibra encima una de ellas del equipo Rockets y esto sirve para seguir cambiando el nervio por emoción, intercambiamos algunas palabras y nos deseamos la mejor de las suertes.

Dejo todo y salgo caminando por un pasto que mas bien pareciera hielo, se me helan los pies y el frío alcanza a llegar hasta mis espinillas, las cuales respingan pero yo sigo en lo mío, nada me afectará este día, nada podrá arruinar lo que he planeado durante 4 meses, "todo saldrá bien" me repito una y otra vez completamente seguro de que así será.



Al salir de la transición ahí están ellos: Anel, Anakin, Kilian y Claudia mi sobrina y couch de natación quién me ayuda a realizar algunos estiramientos y movimientos de calentamiento para ponerme a punto para la batalla.

Me despido de todos ellos y los dejo justo a un costado de la laguna artificial para tomar mi lugar, me mezclo entre la multitud y me topo con Héctor Lavalle, un gran colega y amigo que me ha apoyado mucho en todo esto como varios mas; intercambiamos algo de palabras y nos vemos confiados, cada uno en lo suyo y con su capacidad, pero seguros de romper nuestras metas.



El primer atleta en salir es Rafael Jaramillo, primer triatleta invidente al que le piden un aplauso que se convierte en el mas estruendoso aplauso del que haya sido parte en muchísimo tiempo, esto sin duda me altera, me ruedan algunas lagrimas y me emociono al máximo. mi corazón no deja de latir a gran velocidad, mi reloj me lo dice y no paro de temblar, la comunión y hermandad que se siente en el ambiente es inmejorable, puntos importantes para que esto empiece de la mejor forma.



Empiezan a salir las diferentes categorías, y el minuto de la verdad se acerca hasta que nos llaman a formación, ingreso al agua y espero el cornetazo de salida, a lo lejos se ven ya los atletas levantando una nube de vapor con cada brazada una buena postal hasta que es hora de introducirse en el agua y dar brazadas como quién lucha por no morir ahogado.



Esta vez tomo mi paso y no invento pendejadas con las que aún no se lidiar; como en Vallarta que quise salir a todo galope para acomodarme y lo único que ocasione fue una asfixia tal que tuve que nadar de perrito dos veces para poder tomar aire. Bueno esta vez no, salgo por dentro lo suficientemente abierto para no ir engentado y me direcciono a la primer boya.

Pasan los metros y me siento bien, tanto que creo que le voy haciendo al wey aquí, por lo que decido apretar la marcha al dar vuelta sobre esta primera. Viro y me dirijo a la siguiente ahora con un sol que empieza a molestar, me mantengo en el grupo de mas volumen y al pasar la segunda boya empiezo a sentir que me rezago, pero empiezan a aparecer también las primeras gorras de los que van algo retrasados así como las de los que vienen detrás de nosotros.

Sigo mi camino y el primer talonazo al gogle me deja a ciegas, lo tomo con calma, nado de dorso y trato de sacar el agua... después de 5 brazadas noto que no hizo contacto, y que el barco hace agua, vuelvo a sacudir sin frutos por lo que me quedan dos opciones: 1) me la paso sacudiendo el chingado gogle o 2) cierro un ojo y respiro solo del lado derecho. Opto por la segunda aún a falta de 700 metros para terminar.

"Nada te afectará hoy" me repito una y otra vez, y así es, ni los nadadores que son tan rápidos como desorientados que se cruzan una y otra vez, ni el agua en ambos lentes ni las patadas, jalones y amontonamientos me hacen perder el control así que en menos de lo que espero ya me encuentro sobre la última recta que te lleva hasta el muelle donde toda la gente grita fuertemente para dar ánimo a todos los nadadores que intentan salir del agua cuanto antes. Llego me dan la mano y me ayudan a salir del agua, miro mi reloj y es inevitable sentirse alegre, he rompido mi propia marca y mi pronostico. he dejado el agua antes de lo previsto. sonrió, saludo a mi Anel quién grita "bien hecho Panzer" desde las vallas y hay que recorrer los 700 metros que hay hasta la transición.




Durante la corrida me acalambro, WTF! no es posible, pero el aire tan frío y la nula patada de mi técnica de natación me cobran la primer factura del día a 1/6 de lo que será el evento, camino un poco y 18 atletas me pasan, no puedo seguir caminando y troto mas ligero pero no detengo mi paso.

Llego a la transición agitadísimo y me siento para acomodar mis cosas, no lo tenía planeado pero de no ser así habría terminado encima de las otras bicis que estaban a mi lado, tirando todo y haciendo un desmadre. Me coloco el casco, los calcetines, zapatillas tomo mi bici y salgo con los lentes en la mano. Monto sobre la bici y me pongo los lentes totalmente empañados por la evaporación del pasto, pero aguanto así en breve se les quitará y ya no hay tiempo para andar malabareando entre lentes, piernas tiesas e inexperiencia.
Un día antes recorrí el 30% de la ruta de ciclismo lo cual me dio una idea de que vendría. 850 metros de desnivel durante los 90km era algo para considerar, así que lo tomé con muchas reservas al inicio.






Mucha cadencia, poca resistencia entre platos asi durante los primeros 20 minutos, luego después de ver como decenas de competidores me pasaban y me dejaban atrás decido que no puedo seguir con este paso; bajo 2 piñones y comienzo a meterle poder.

La ruta fue muy bonita, hermosa, grandes vistas, mucho paisaje y cuestas pesadísimas, lo mejor el ambiente de cada competidor, los gritos de los organizadores; por el abastecimiento no tengo ninguna queja, y tampoco por el poco pero ruidoso publico que hubo en los diversos poblados que cruzamos durante el trayecto que no paraban de gritar y animar a todos los ciclistas.

El calor comenzaba a apretar pero el aire fresco de la montaña ayudaba de buena manera. transcurrieron los kilómetros y durante esa parte llegaba a perderme, de repente me encontraba a mi mismo pedaleando muy rápido o muy lento en esos viajes de pensamientos que llegan de todas partes cuando te "vas" y cuando regresa tu mente de esos viajes de cansancio tienes que reajustar el paso y continuar. Comer fue una parte importante en este lapso, comí durante toda la ruta, dos barras energéticas, un sándwich de jamón de pavo con philadelphia y como 3 litros de agua, sabía que debía cuidarme lo suficiente para no echar todo a perder, y así lo hice, tal como me lo aconsejo Mane, todo salió a la perfección.



Pedaleé por mas de 3 horas que no estaban en mi libreto, pero que dadas las condiciones del terreno considero que no fueron tan malas, soy malito sobre la bici asiq ue lo hice lo mejor que pude inclusive después de apretar al máximo durante los 30km de bajada continua que tuvo la ruta; todo lo que sube tiene que bajar y asi fue, logré recuperar mucho tiempo y pasar al menos a 40 ciclistas lo que me dejo sumamente motivado para la última y mas dolorosa parte del evento: El medio maratón.

 
Hago una transición un tanto más rápida que la de natación pero lenta aún, me tomo un electrolit completo y salgo con la cadera muy pesada a dar los primeros pasos.

Nunca antes había corrido un medio maratón, sin embargo haber subido el Iztacihuatl con 26km totales y 2000 de ascenso acumulado ya es en sí una preparación seria inclusive para un maratón completo.




La carrera se dividió en dos vueltas a un circuito, la primera vuelta fue pesadísima, larga, tediosa, cansada y dolorosa. Un adoquin mal colocado con puntas y bordos que se encajaban en los pies por doquier, yo era incapaz de imprimir un paso, o siquiera de olvidar el dolor y concentrarme en la técnica adecuada, de un momento a otro ya me encontraba corriendo como sea, con la espalda agachada, la cadera floja, las piernas por ningún lado y jadeando como perro acalorado. Al terminar la primera vuelta me doy cuenta que ya llevo 1:10 minutos y me doy cuenta que no puedo continuar así, que estoy hecho para un poco mas, y sobre todo que he entrenado lo suficiente como para no correr "como sea" y empezarlo a hacer con la técnica adecuada, cabeza en alto, espalda erguida y cadera levantada.



Durante mi carrera me encuentro a mi familia en todas partes, apoyándome, gritándome y acompañándome en mi trote durante algunos metros, ellos están mas acalorados que yo, ellos pudieran estar descansando en la habitación del hotel, pero están aquí compartiendo conmigo este momento de gloria, eso sin duda motiva, y por lapsos quitas la cara de "ido" que llevas encima para darles la mejor cara y agradecerles con un aplauso que están ahí contigo compartiendo tu felicidad; así que sigo bajando el paso por kilometro y empiezo a sentirme fuerte de nuevo.



Cada puesto de abastecimiento era como una inyección de vida, me ponía bolsas de hielo por debajo de la licra para entumir los cuádriceps y los gemelos, los entumía un poco y seguía apretando el paso. "4:54 y solo 4 kilómetros para la meta", me repetía constantemente tratando de mantenerme motivado y ya no aflojar el paso.



Durante la carrera nunca estuve solo; si no era la familia, eran los integrantes del equipo de los Rockets que me decían palabras como "te veo bien Panzer" "Vas bien estas entero" y una vez que te la crees el dolor deja de ser importante, corres mas, cada vez mejor con el orgullo intacto, incluso me cruce un par de ocasiones con Héctor Lavalle quién también no vaciló en darme su apoyo cada que me cruzaba con el...
2km para la meta, pienso que a este paso eso significa 10 minutos mas como máximo solo 10 minutos para culminar la obra; a esa altura es inevitable sentir escalofríos, que no sabes distinguir si es por la deshidratación o por la emoción de que por fin vas a cumplir con este objetivo marcado desde hace ya mucho tiempo... 1km para la meta... a esta altura comienzo a buscar a mi hijo entre el público, tengo que encontrarlo, tengo que cruzar la meta con él, y mas ahora por que justo un día antes mientras me daban apoyo mecánico fue él quién nos dijo "quiero hacer Triatlón Papa" -Puta Madre- eso le enchina la piel a cualquiera, así que sigo buscándolo desesperadamente hasta que 300 metros antes de la meta lo encuentro y extiendo mi mano para tomar la suya y compartir este momento de felicidad tan añorado con el, ingreso a la parte final y un competidor al frente nos estorba, tomo a Anakin y lo rebasamos, quiero cruzar la meta libre de gente, quiero disfrutar este momento de grandeza con mi hijo, cruzo la meta, veo el reloj, le he bajado mucho a la segunda vuelta de carrera, me hinco, abrazo a mi hijo, las lágrimas son inevitables, me abrazo de el tan fuerte que siento que se deshace en mis brazos, el solo me dice "Papa no puedo respirar" me rio con el y le beso la frente "gracias por estar aquí hijo, gracias por acompañarme" y con su dulce y tierna voz responde "de nada Papa"




Seis horas y diecisiete minutos me tomo cruzar la meta de mi primer medio Iron, de 113km, no pude dar mas, ese es mi nivel hoy y ahora, mañana será otro día, hoy estoy completamente satisfecho de lo que he hecho, todo salió a la perfección, hoy no pude haber pedaleado mas rápido, mañana si podré hacerlo por que me seguiré preparando pensando en el siguiente gran reto... así es esto no se pierde no se gana en mi nivel, solo se aprende y se continua trabajando hasta conseguir lo que se quiere.



Gracias por leer, nos vemos en Tapalpa para el XTERRA Global Tour, Triatlón a campo traviesa.

lunes, 1 de julio de 2013

Las 5 semanas mas duras hasta hoy.

Ya viene la prueba importante de este año, aquella que decidirá si debo continuar con todo esto y si lo mejor será comprar un trompo o ponerse a jugar rayuela.

5 semanas fueron las de mayor importancia previo al reto del 14 de Julio.
5 semanas de mucha intensidad, mucho kilometraje y mucho dolor.


5 semanas que culminaron este pasado sábado 29 de Junio con un estupendo trazo de ruta de ciclismo y una de carrera por montaña mucho mejor solo para terminar en el río de agua caliente para degustar un pollo asado y relajar los músculos en estas terapéuticas aguas naturales que emanan de nuestro preciado bosque esta vez cómo la semana anterior acompañado del Terrible.

Durante estas 5 semanas se completaron 20 kilómetros de natación, 730 km de ciclismo y 150 km de carrera y ahora las siguientes dos semanas serán solo de tappering final.

Agradecimiento aparte a mi dama, que no ha parado de alentarme, apoyarme y empujarme de la cama cada mañana cuando la hueva y el cansancio intentan bloquearme; que ha sido mi patrocinador, mi porra, mi abastecimiento, mi couch y bueno que mas puedo decir...

Gracias Anel por creer en mí y por cada palabra de motivación que me has entregado.

Ruta de Ciclismo: Estadio Jalisco, Tala, Cañon de las Flores 70 km.

Carrera pedestre por los senderos de Rio Caliente

Excelente vista mejor entrenamiento.

Panzer: Estará buena
Terrible: Yo creo que sí
P: Almenos esta fría
T: Ademas hay un chingo de pececillos
P: Si además no esta estancada
T: Si además muero de sed
P: Si además nada que un treda no solucione.


Al final de la ruta con 12.6 km y mas de 250 mts de desnivel.

Con mi soporte en el rio de aguas termales.


El Kilian ya le anda por andar con su padre.

Mi mejor equipo.